La reciente visita de la pareja a la lujosa joyería Tiffany & Co.
en Perth (Australia) despertó todo tipo de rumores sobre la posibilidad
de una inminente boda entre Jennifer y Casper. Sin embargo, el agente
de la diva del Bronx se encargó de desmentir las informaciones de manera
tajante.
“Jennifer y Beau (Smart) no estaban comprando anillos de boda”, señaló recientemente uno de los representantes de Jennifer al periódico New York Daily News.
Estas últimas especulaciones se sumaron al revuelo que ya había
despertado en octubre la aparición de Jennifer en París con un enorme
anillo, aunque tampoco se trataba en ese caso de un símbolo de
compromiso. En caso de decidirse a pasar por el altar con Casper, este
sería su cuarto intento, después de tres matrimonios fallidos con Ojani
Noa, Cris Judd y Marc Anthony y un compromiso con Ben Affleck que no
culminó.
Sea como sea, Jennifer y Casper presumen de su romance por todo el mundo, ya que el bailarín trabaja en la gira de la cantante,
‘Dance Again World Tour’, con la que llevan cinco meses viajando
juntos. También los acompañan los dos hijos que la artista tuvo con Marc
Anthony, Max y Emme, a los que cuida su abuela Guadalupe mientras su
famosa madre trabaja.
Jennifer sigue cosechando un gran reconocimiento por su espectáculo,
que ayer reunió a 7.000 personas en Hindmarsh (Australia). Tras tres
conciertos más en el archipiélago, la cantante neoyorquina cerrará su gira en Puerto Rico, de donde es originaria su familia, tras lo que se tomará un merecido descanso durante las fiestas navideñas.
Vía bang showbiz