La afición del componente de la boy band británica por los grabados corporales le hicieron visitar este miércoles el centro Shamrock Tattoos de Los Ángeles, donde pidió que le dibujaran dos pájaros en el pecho.
El cantante no pudo resistirse a presumir de ellos frente a sus compañeros de banda, Niall Horan, Louis Tomlinson, Liam Payne y Zayn Malik, ante los que se bajó el cuello de la camiseta para enseñárselos.
El mes pasado, Harry se hizo dos tatuajes en sus brazos que decían:
‘Things I Can’ (Cosas que puedo) en el derecho. Y ‘Things I Can’t’
(Cosas que no puedo) en el izquierdo.
También tiene una estrella, la letra A, un tornillo y una percha de ropa.
Pero Harry no es el único miembro de One Direction con querencia por los tatuajes.
Zayn también luce con orgullo sus grabados, y Louis y Liam se han
hecho tatuajes de tornillos que casaban con los que ya tienen Harry y
Zayn.
“Liam y yo nos hemos unido al club y nos hemos hecho dibujos en los
tobillos, ¡ahora los tenemos todos menos Niall! ¡Venga Niall!”, tuiteó
Louis.
Niall sin embargo, tiene miedo a las agujas y hasta ahora se ha negado a tatuarse.