Ashley Greene encontró en su personaje de Alice Cullen
una oportunidad para que la gente pudiera conocer sus dotes de actriz,
aunque reconoce también que no todo han sido facilidades.
"A veces es duro, porque la gente se limita a decir: 'Oh, no queremos a
nadie más de Crepúsculo'. Participar en la saga ha sido emocionante,
pero ha hecho las cosas un poco difíciles, porque tienes que demostrar
mucho de ti misma si quieres conseguir papeles más profundos", contó Ashley a la revista GQ.
Además, otra de las desventajas de ser una de las vampiras más famosas
de Hollywood podría haber sido el peso de la fama, puesto que tanto ella
como el resto del reparto se convirtieron de la noche a la mañana en
estrellas internacionales cuando, en el caso de Ashley,
'Crepúsculo' era solo su tercera película. Cuatro años después, la
estadounidense tiene casi dos millones de seguidores en Twitter, aunque
quiere intentar mantener su privacidad tanto como pueda.
"Les he dicho a mis amigos y familia que no me tuiteen nada, aunque
parezca estúpido, pero si quiero que mis fans sepan que he ido a ver una
película, ya lo escribiré yo", aseguró tajante.
Por otro lado, Ashley también cree que usar la red
social bajo los efectos del alcohol puede provocar situaciones realmente
lamentables, tal y como ha visto en otros compañeros de profesión.
"Si he bebido un sorbo de alcohol, no quiero ni abrir mi Twitter. Es lo
peor que puede hacer un actor, es cuando te metes en problemas. He
visto las cuentas de muchos actores y he pensado: '¿De verdad has
tuiteado esto?'", admitió.
A punto de estrenarse la última entrega de la historia que sigue el
romance entre Bella y Edward -a quienes encarnan Kristen Stewart y
Robert Pattinson, también pareja en la vida real-, Ashley cree que ha
llegado el momento de afrontar nuevos retos, para los que está dispuesta
a dejarse la piel si se trata de un proyecto que le apasione.
"El otro día tuve que romper una pared. Estaba en un casting y el
director me dijo: '¿Te acuerdas de la secuencia en el guion en la que
tienes que luchar por la vida de tu novio? Quiero que te pongas en
situación y que te muevas por la sala como si estuvieras corriendo para
salvarlo'. Después de hacerlo, no me pude contener y rompí a llorar.
Entonces pregunté si podía hacerlo otra vez y al repetirlo hice un
agujero en la pared. Solo pude decir: 'Pagaré por los destrozos, lo
siento mucho'", explicó.