Britney Spears se comparó con Kim Kardashian, pero no por algún trabajo que haya hecho la socialité, sino por su imagen, ya que considera que jamás podría ser como ella.
La cantante concedió una entrevista para el número de octubre de Elle, de la que reproduce algunos fragmentos el sitio x17online.com.
Spears explicó que prefiere tener un estilo más bien alejado del glamour.
"Amo mis jeans y mis suéteres- realmente soy un tomboy (chica masculina)
de corazón. Así que en verdad es muy difícil para mi ser como Kim
Kardashian y estar maquillada y con el cabello listo cada vez que salgo
de mi casa. No creo en eso".
Acerca de la fama, Britney explicó que durante mucho tiempo estuvo bajo
el microscopio, pero "ya no pongo atención en las tonterías. Hace tiempo
dejé de entristecerme por las cosas que la gente hacía sobre mi",
aseguró la intérprete.