Desde diciembre de 1997, cuando visitaron México por primera vez, Los Amigos Invisibles comenzaron
a aproximarse al público de ese país, como quien cultiva una amistad.
En 2006 ocurrió un hito que les abrió las puertas a compromisos
multitudinarios: los caraqueños actuaron en el festival Vive Latino,
donde compartieron tarima con Rubén Albarrán, de Café Tacvba, y animaron
a cerca de 50.000 personas.
Ahora se coronaron, ya no al aire libre y con licor incluido, sino en uno de los escenarios más importantes de la capital: el Auditorio Nacional.
"En aquella oportunidad en 1997 hicimos un showcase en el Hard Rock Café", recuerda José Rafael "Catire" Torres, bajista y habitual vocero de la agrupación: "Éramos unos pelaos y estábamos pendientes más bien de salir a rumbear. Yo tenía 23 años de edad.
Y esa vez nos sentó una jefa de Warner, que era la dura de la empresa. Nos felicitó por la propuesta y nos dijo: `Vamos a trabajar duro para ustedes.
No me defrauden’. Y todos nos quedamos sorprendidos, con un güisqui en la mano. Ahí fue cuando pensamos: `¡Guao, esta gente va en serio!".
Torres no titubea en afirmar que, después de Venezuela, México es el país en el que mayor furor generan. Por eso decidieron esmerarse la semana pasada para llevar un show diferente al Auditorio Nacional. Lalo Noriega, su mánager, cronometró 2:15 horas de espectáculo. El Universal, uno de los grandes diarios mexicanos, contó 10.000 personas en el público y tituló "Convierten el Auditorio Nacional en gran salón de baile".
El sexteto ya no ensaya con la frecuencia de otrora, en parte porque sus integrantes viven en 4 ciudades diferentes: Julio Briceño (voz) y José Manuel Roura (batería), en Miami; José Luis "Cheo" Pardo (guitarra), en Nueva York; Torres (bajo) y Mauricio Arcas (percusión), en Caracas; y Armando Figueredo (teclados), en Ciudad de México. El otro motivo es porque simplemente, después de 21 años de recorrido, no lo necesitan, y menos cuando se trata de hits como "Disco anal", "Sexy", "Ponerte en cuatro" y "Cuchi cuchi", que han estado en el repertorio desde que fueron grabadas.
"Generalmente no ensayamos, pero en estos casos sentimos la responsabilidad de que salga ejecutado lo más profesionalmente posible. Además, el show fue más largo de lo común e insertamos referencias pop muy específicas de los mexicanos", añadió Torres.
La gozadera incluyó guiños como "Vuela vuela" de Magneto, "Cómo es posible que a mi lado" de Luis Miguel, "Muévelo" de Fey y "La negra Tomasa" de Caifanes; y fragmentos de Control Machete y Plastilina Mosh. "También incluimos se ríe una cosa superchaborrísima que se llama 3BallMTY.
Es una música que parece un chiste, pero la ponen en todas las discotecas".
En lo que va de año Los Amigos Invisibles han ofrecido más de 40 conciertos. Ahora tocarán en Colombia, Estados Unidos, Chile y otra vez en México.
En casa estarán en diciembre.
El nuevo disco, el noveno de su carrera, está en etapa de posproducción, contiene 12 canciones y será editado en 2013.
Ahora se coronaron, ya no al aire libre y con licor incluido, sino en uno de los escenarios más importantes de la capital: el Auditorio Nacional.
"En aquella oportunidad en 1997 hicimos un showcase en el Hard Rock Café", recuerda José Rafael "Catire" Torres, bajista y habitual vocero de la agrupación: "Éramos unos pelaos y estábamos pendientes más bien de salir a rumbear. Yo tenía 23 años de edad.
Y esa vez nos sentó una jefa de Warner, que era la dura de la empresa. Nos felicitó por la propuesta y nos dijo: `Vamos a trabajar duro para ustedes.
No me defrauden’. Y todos nos quedamos sorprendidos, con un güisqui en la mano. Ahí fue cuando pensamos: `¡Guao, esta gente va en serio!".
Torres no titubea en afirmar que, después de Venezuela, México es el país en el que mayor furor generan. Por eso decidieron esmerarse la semana pasada para llevar un show diferente al Auditorio Nacional. Lalo Noriega, su mánager, cronometró 2:15 horas de espectáculo. El Universal, uno de los grandes diarios mexicanos, contó 10.000 personas en el público y tituló "Convierten el Auditorio Nacional en gran salón de baile".
El sexteto ya no ensaya con la frecuencia de otrora, en parte porque sus integrantes viven en 4 ciudades diferentes: Julio Briceño (voz) y José Manuel Roura (batería), en Miami; José Luis "Cheo" Pardo (guitarra), en Nueva York; Torres (bajo) y Mauricio Arcas (percusión), en Caracas; y Armando Figueredo (teclados), en Ciudad de México. El otro motivo es porque simplemente, después de 21 años de recorrido, no lo necesitan, y menos cuando se trata de hits como "Disco anal", "Sexy", "Ponerte en cuatro" y "Cuchi cuchi", que han estado en el repertorio desde que fueron grabadas.
"Generalmente no ensayamos, pero en estos casos sentimos la responsabilidad de que salga ejecutado lo más profesionalmente posible. Además, el show fue más largo de lo común e insertamos referencias pop muy específicas de los mexicanos", añadió Torres.
La gozadera incluyó guiños como "Vuela vuela" de Magneto, "Cómo es posible que a mi lado" de Luis Miguel, "Muévelo" de Fey y "La negra Tomasa" de Caifanes; y fragmentos de Control Machete y Plastilina Mosh. "También incluimos se ríe una cosa superchaborrísima que se llama 3BallMTY.
Es una música que parece un chiste, pero la ponen en todas las discotecas".
En lo que va de año Los Amigos Invisibles han ofrecido más de 40 conciertos. Ahora tocarán en Colombia, Estados Unidos, Chile y otra vez en México.
En casa estarán en diciembre.
El nuevo disco, el noveno de su carrera, está en etapa de posproducción, contiene 12 canciones y será editado en 2013.
