El conocido vampiro protagonista de la saga de Crepúsculo, Robert Pattinson, contó una graciosa anécdota que le sucedió en 2008 mientras filmaba en España, “Sin Límites”, la biografía de Salvador Dalí, confesión que hizo el actor a la publicación Bang News.
El joven actor cuenta: “Había una chica fuera de mi apartamento todos los días durante tres semanas y un día me sentí increíblemente aburrido, por lo que le dije, ‘¿Te apetece ir a cenar o lo que sea? Nadie más quiere salir conmigo”, dijo Pattinson al diario, y agregó: “Sus padres tenían un restaurante, me llevó allí, me quejé de toda mi vida en unas dos horas. Luego, cuando terminamos de comer me dio la cuenta para que pagara”.
Robert explica que, aunque él se sintió muy bien abriéndose con la chica al contarle sus problemas, la presunta seguidora al parecer se sintió defraudada
al descubrir que Pattinson, más allá de ser una celebridad, es un
persona común y corriente y no todo en su vida es color de rosa. “Después de esa cena ya nunca más vino a esperarme fuera de mi apartamento”.
La fama de este actor ha ido creciendo de gran manera, es por esto que ahora, cuando desea salir a la calle se disfraza para no ser reconocido, pero admite que no lo hace muy bien: “Lo intento, aunque no siempre funciona.
Al principio traté de hacer gestos raros, pero no es una táctica muy
buena. Al final, se te pegan algunos tics. Cuando lo haces, atraes la
atención a la parte equivocada de tu cuerpo (el rostro), y la gente se
termina dando cuenta de que soy yo”.