La extravagante cantante Lady Gaga mostró su respeto hacia Amy Winehouse
– que murió el pasado sábado en su casa de Camden, al norte de Londres
-, pero advirtió que su trágica muerte a los 27 años es una dura lección
para el público.
“Es realmente devastador, y creo que supone una lección para el mundo
– no maten a la superestrella. Cuiden de ella. Cuiden su alma”, comentó
en una entrevista a la emisora de radio estadounidense Omaha 94.1.
Lady Gaga, de 25 años, confesó que antes llevaba el pelo negro, con un estilo que recordaba al de la cantante de Rehab, y que la confundían con ella cuando se publicó el álbum Back to Black en 2006.
“Yo no era nadie cuando ella se dio a conocer. Llevaba el pelo oscuro
y cada vez que iba por la calle la gente que pasaba me decía, ‘¡Amy!’ Y
de nuevo me gritaban, Back to Black”, añadió la intérprete de Judas.
“Me encantaba, y recuerdo sentirme sola porque ella era muy diferente a mí y muy especial”.
Lady Gaga también rindió homenaje a la cantante a través de Twitter, publicando que Amy “cambió la música pop para siempre”.
Amy Winehouse fue incinerada este martes. La ceremonia judía se
celebró en Londres de manera privada con su familia, incluyendo a sus
padres Mitch y Janis, a su hermano Alex, a su novio Reg Traviss, y a una
gran cantidad de amigos cercanos, como el productor Mark Ronson – que
trabajó con ella en el álbum Back to Black - y su gran amiga Kelly Osbourne.
