Tras haber recuperado un percance de salud (la semana pasada fue ingresada tras sufrir mareos y dolores de cabeza), la novia de Justin Bieber ha concedido una entrevista donde confiesa que no es ningún modelo, a pesar de la multitud de fans que la siguen diariamente.
Selena Gómez no quiere que su estatus de estrella adolescente termine ejerciendo demasiada presión sobre ella, y asegura en la revista «E!» que simplemente es una chica que canta: "Soy humana y por ello, cometo muchos errores, pero sé que esos errores en mi trabajo la hacen sacar más provecho a las cosas".
"Yo nunca dije que quería ser un modelo a seguir, no soy perfecta", dice la jovem que también recuerda lo duro que fue el divorcio de sus padres cuando ella era pequeña: "Yo no quería una familia tan mala. Yo quería tener a mi papá y mi mamá juntos".