La vida de Cory Monteith, uno de los protagonista de la serie Glee, no siempre estuvo llena números musicales y momentos felices.
El actor de 29 años recientemente confesó que desde muy joven empezó a
consumir drogas y a escaparse de la escuela. Su adicción fue
incrementándose durante su adolescencia hasta llegara un punto donde su
familia realmente temía por su vida y fue cuando decidieron enviarlo a
rehabilitación.
“Consumía cualquier cosa y en la mayor cantidad posible… Tenía un
serio problema” reveló Monteith quién empezó a tratar su adicción a las
drogas cuando apenas tenía 19 años. La estrella de Glee también declaró que en aquella época fue capaz de robarle a miembros de su familia para poder comprar drogas.
La familia del actor decidió darle un ultimátum para que aceptara
asistir a la rehabilitación y hasta lo amenazaron con entregarlo a la
policía. Desde ese momento Cory decidió darle un cambio radical a su
vida y encontrar el por qué de su adicción.
Con mucho esfuerzo Monteith logró dejar sus malos hábitos y empezó a
asistir a clases con un coach de actuación. El año pasado el actor
retomó la escuela secundaria y finalmente recibió su título.